Se recomienda llevar a tu hijo al pediatra dentro de la primera semana después del nacimiento para una revisión inicial. Después de eso, se deben programar visitas regulares según el calendario de vacunación y desarrollo recomendado por el médico.

Algunos signos de que tu hijo puede estar enfermo incluyen fiebre alta, dificultad para respirar, erupción cutánea inexplicable, dolor intenso, letargo o irritabilidad extrema, entre otros. Siempre es mejor consultar con un pediatra si tienes preocupaciones sobre la salud de tu hijo.

Se recomienda programar visitas de seguimiento regulares según el cronograma de citas sugerido por el pediatra, que generalmente incluye visitas mensuales durante los primeros meses de vida, seguidas de visitas menos frecuentes a medida que el niño crece y se desarrolla.